Doménico Salvatore tras italianizar varios rincones gijoneses acaba de abrir su casa propia bajo la reconfortante y sabia referencia familiar de La Nonna
Dado que la espera nos protege de recalentados mortecinos, llevémosla con alguno de los aperitivos ofrecidos para acortarla , como por ejemplo unas aceitunas aliñadas con aceite, ajo, perejil y pimientos, mientras ojeamos la oferta que sin ceder italianidad incorpora algunas influencias -mejillones a la sidra, ravioli con crema de oricios- de la patria adoptiva